Probióticos específicos para aumentar las defensas: ¿funcionan?

Un hombre se iba cada Navidad a Tenerife con su familia. Siempre que volvía a Soria  (imagina el cambio de temperatura) se ponía malo, hasta que empezó a tomar probióticos específicos para aumentar las defensas. ¿Tú las notas bajas? ¿Te resfrías mucho? Mira cómo refuerzan el sistema inmune y cuáles son mejores. 

Cómo actúan los probióticos en las defensas

Diferencia entre probióticos, prebiótico y sinbióticos

Antes de nada hay que distinguir.

Los probióticos son microorganismos vivos que en cantidad suficiente aportan beneficios para la salud, entre ellos la mejora del sistema inmunológico. Se encuentran de forma natural en alimentos como los yogures o el kéfir.

Los prebióticos son fibras no digeribles que ciertas bacterias, tanto de nuestra flora como los probióticos, pueden usar para aumentar su crecimiento, viabilidad y actividad. Inulina, lactulosa, fructooligosacáridos (FOS), etcétera.

Un sinbiótico (con “n”, no con “m”) es la combinación de ambos para complementar los efectos beneficiosos o potenciarlos por sinergia.

Microbiota intestinal: nuestro ejército personal

Para entender cómo actúan los probióticos en las defensas, tenemos que poner la lupa en la flora o microbiota intestinal. Ese ecosistema microbiano que se aloja en nuestro intestino (¡y sin pagar alquiler!), principalmente bacterias.

¿Cuál es su relación con el sistema inmune?

• Es un escudo contra patógenos, como si fuera nuestro propio ejército personal. Los inhibe a través de distintos mecanismos.
• Tiene acción inmunomoduladora. Ejerce una gran influencia en la respuesta inmunológica intestinal, pieza clave en la inmunidad del organismo.
• Promueve la inmunonutrición. Produce vitaminas como la B12 y el ácido fólico que contribuyen al funcionamiento inmunitario normal. 

Si la microbiota se desequilibra por infecciones, la dieta, antibióticos…, tenemos lo que se conoce como disbiosis. ¿Qué ocurre?

• Por un lado, el sistema inmune pierde eficacia y por tanto los patógenos te invaden con más facilidad. “Hummm, esta es la mía”, piensan.
• Por otra parte, se favorecen procesos alérgicos y autoinmunes. Recuerda que una alergia es una reacción inmunitaria exagerada ante algo inofensivo.

Nos estamos refiriendo solo a la inmunidad por el tema del artículo, pero la microbiota y la disbiosis tienen implicaciones a más niveles (digestivo y metabólico sobre todo).

Los 7 beneficios de los probióticos para el sistema inmune

Si se resiente la flora, perdemos su “halo protector” y nuestras defensas empeoran. Ahí es donde entran los probióticos.

¿Qué se está viendo en estudios? 

• Equilibran la microbiota. Favorecen una mejor composición en la flora: aumentan los microorganismos “buenos”, disminuyen los “malos”.
• Refuerzan la barrera intestinal: epitelio y capa mucosa, ambos componentes defensivos cruciales.
• Inhiben el crecimiento de virus y bacterias: compiten por el uso de nutrientes (les “roban” el sustento para que no puedan proliferar) y sintetizan sustancias antimicrobianas que reducen su adherencia, replicación y acción.
• Mejoran la inmunidad en el intestino: facilitan la función de células inmunes e inducen moléculas como la inmunoglobulina A, citoquinas y defensinas.
• Influyen a nivel sistémico: la microbiota intestinal se relaciona con la mejora del estado inmunitario en otras mucosas, como la bronquial y la urogenital.

Todo esto se traduce en una mayor protección frente a infecciones. Hay estudios por ejemplo que han observado cómo los probióticos pueden ayudar contra virus gastrointestinales (diarrea por rotavirus) y respiratorios (resfriados, gripe, COVID-19).

Por eso pueden ser muy útiles si sueles enfermar en ciertas épocas (otoño e invierno, típico) o si notas las defensas bajas (por estrés, falta de sueño, dieta deficiente…).

Además, reducen la susceptibilidad a los alérgenos y alivian los síntomas asociados a la alergia.

Qué probióticos son buenos para las defensas

Cepas efectivas según la evidencia científica

Hay personas en la farmacia que a veces alucinan con la variedad de probióticos que hay (normal). Para el tránsito, para la flora vaginal, para el colon irritable…

¿Es puro marketing y en realidad cualquiera serviría para las defensas?

La comunidad científica aquí es clara: los efectos son muy específicos de cada cepa. Es más, una misma cepa puede tener distintos según se use sola o combinada.

Algunas que se ha comprobado que pueden ayudar al sistema inmune son (hay más):

• Lactobacillus (L.): 

• • L. rhamnosus GG.
  • L. casei I-3429.
  • L. paracasei Lpc-37.
  • L. helveticus I-1722.
  • L. plantarum Rosell-1012.

• Bifidobacterium (B.):

• • B. lactis Bi-07.
  • B. longum I-3470.
  • B. infantis I-3424.
  • B. bifidum I-3426.
  • B. breve I-3425.

• Streptococcus thermophilus I-3428.

• Saccharomyces boulardii ATY-SB-101.

La primera palabra es el género (ej: Lactobacillus), las dos primeras juntas la especie (ej: Lactobacillus casei) y el código alfanumérico la cepa (Lactobacillus casei I-3429).

Probiótico muerto, probiótico inútil

Sea cual sea la cepa, en su peregrinaje hacia la microbiota debe poder sobrevivir a la acción microbicida de la saliva y a los jugos gástricos del estómago. Una vez en el intestino, debe resistir la bilis, las secreciones pancreáticas y las enzimas intestinales.

Vamos, peor que una carrera de obstáculos. Si se formula con algún sistema que aumente su viabilidad, mejor.

Calidad antes que cantidad

No hay un consenso claro acerca de la dosis óptima de microorganismos que debe aportar un probiótico. La cantidad se mide en UFC (Unidades Formadoras de Colonias) y se acepta que debe ser al menos de cien o mil millones (10⁸ – 10⁹).

Pero más no siempre es mejor. Importa más qué cepas específicas se emplean que el recuento total. 

Mejores probióticos para el sistema inmunológico

Considerando todo lo anterior, te contamos los que en nuestra opinión y por experiencia de los usuarios de Farmacias Carrascosa son los mejores probióticos para las defensas. Todos son aptos para celíacos e intolerantes a la lactosa.

Para adultos: Ns Florabiotic VS Carrascosa Lab Florafast

¿Quieres enfrentar una época puntual o una temporada larga?

Para un tratamiento continuo de varios meses Ns Florabiotic funciona genial. Ayuda a mantener el sistema inmune a tono y a resistir mejor las situaciones adversas diarias.

Contiene 2 cepas muy específicas: Lacticaseibacillus rhamnosus VES001 y Bifidobacterium lactis VES002 (3,3 mil millones UFC).

• Si la fibra te causa mucha hinchazón y gases… No lleva prebióticos (fibra no digerible), por lo que te sentará mejor a la tripa. 
• Todos vivos. Tiene un sistema de microencapsulación con el que sobreviven el 100% de bacterias (acuérdate: probiótico muerto, probiótico inútil).
• Envase para 1 mes. Trae 30 cápsulas, 1 al día. Sale más económico si estás pensando en tomarlo durante un periodo más prolongado.

La contra es que, al no incluir prebióticos, la eficacia es quizá un poquito menor. En la farmacia la mayoría de personas que lo usan nos comentan que les va genial, pero si te notas muy débil, prueba el siguiente que te recomendamos.

Es apto para diabéticos.

Para superar una temporada concreta y que no se te haga cuesta arriba, como el invierno o un pico de trabajo, sin duda Carrascosa Lab Florafast es estupendo.

¿Por qué?

Se formula a base de 2 cepas: Lactobacillus acidophilus LA-14 y Bifidobacterium lactis BL-04 (2 mil millones de UFC).

• Si necesitas un gran empuje a las defensas… Este sí tiene prebióticos (FOS) que van a mejorar la efectividad del probiótico. Es raro que provoque molestias digestivas, pero si la fibra no te suele sentar bien, prueba antes Ns Florabiotic.
• Alta supervivencia. Ambas cepas son muy resistentes al ácido del estómago, por lo que tienen una elevada viabilidad (crucial para que hagan efecto).

• Sticks muy cómodos de utilizar. Si te pilla fuera de casa o de viaje puedes tomarlos directamente del envase sin agua.

Lleva solo 12 sticks y es 1 al día, por eso mejor usarlo para épocas puntuales en las que quieras fortalecer el sistema inmune. Con 1 al mes es suficiente.

Por cierto, si estás considerando mejorar tus defensas con uno de estos probióticos, al suscribirte a nuestra newsletter te llega un descuento de 4€.

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Para niños: Neo Peques Probiotic VS Gummies

Aquí hacemos la misma distinción: ¿tratamiento continuado o puntual?

Para solo esos meses más duros que sabes que siempre coge algo o anda con pocas fuerzas, Neo Peques Probiotic. Con diferencia uno de los que más nos piden padres y madres en la farmacia para aumentar las defensas de sus hijos.

Y con motivo.

Contiene 4 cepas de Lactobacillus, 2 de Bifidobacterium y 1 de Saccharomyces (5 mil millones de UFC). 

• Perfil probiótico brutal + prebiótico. 7 cepas en total. Más variedad = más posibles vías para fortalecer el sistema inmunológico. ¡Y con inulina para potenciar más aún los beneficios!
• Les suele encantar. Lleva sirope de frutas, que le da ese saborcillo como a jarabe que más de uno recordamos con gusto de cuando éramos críos. No a todos les gusta, pero en general les sabe rico.
• Viales monodosis muy fáciles de beber. Enroscas con firmeza el tapón para que caiga el probiótico en el líquido, agitas, desenroscas y para adentro.

Trae 8 viales y es 1 al día. Tenemos una madre que se lo lleva dando a su hijo desde el año (ahora cumple 4). Solo un envase al mes en invierno y le va muy muy bien.

Es apto para diabéticos y se puede usar a partir de los 6 meses.

Si prefieres un probiótico para más de continuo, Neo Peques Gummies es top. Hay padres en la farmacia que por ejemplo lo que hacen es dárselo a sus hijos desde septiembre para que aguanten mejor todo el curso escolar.

Lo notan una barbaridad.

Contiene Bifidobacterium infantis y Lactobacillus rhamnosus (1000 millones UFC). También vitamina B6, que contribuye al correcto funcionamiento del sistema inmune.

• No tiene prebióticos, así que pasa como con Ns Florabiotic para adultos. Si la fibra le suele dar flatulencias e hinchazón, dale este probiótico.
• Son gominolas que adoran. Si le cuesta tragar medicamentos y otros productos, con este te preguntará cuánto queda para la siguiente toma.
• 1 mes de tratamiento. Trae 30 gummies, 1 para cada día. Sale mejor de precio que los viales si quieres que lo use varios meses seguidos.

Algunos clientes opinan que tiene mucho azúcar. De hecho, no es apto para diabéticos. Ahora bien, hay que ser lógicos. En un niño sano la cantidad que aporta es muy baja si la comparamos con los beneficios que proporciona a las defensas.

Puedes dárselo a partir de los 3 años.

Dudas frecuentes sobre los probióticos para las defensas

¿Si tomo probióticos mi organismo deja de fabricar la microbiota?

Rotundamente no. No “fabricamos” bacterias, las adquirimos. Primero al nacer de la flora vaginal y fecal de nuestra madre, después de la alimentación, etcétera.

Nunca un probiótico hará que tu organismo se vuelva “vago”. Por concepto ni siquiera tiene sentido. Lo que hace es fortalecer esa microbiota. Si dejas de tomarlo, pues dejarás de notar esos beneficios extra en las defensas. Nada más. 

¿Puedo ahorrarme el probiótico con un Actimel?

Qué recuerdos el anuncio ese de L, Casei e Immunitas.

¿Sabías que Danone ha cambiado el argumento? Ahora los que ayudan al sistema inmune son las vitaminas D y B9, el hierro y el zinc que aporta. Lo hacen así porque es la forma legal que tienen de publicitarse como un refuerzo para las defensas.

Sospechoso.

Aunque Actimel sí que contiene 3 probióticos. Según la web: Lactobacillus bulgaricus, Streptococcus thermophilus y Lactobacillus paracasei ssp. paracasei CNCM I-1518.

¿Entonces sirve?

Bueno, la EFSA (la autoridad europea que regula las alegaciones de salud) no menciona que L. bulgaricus y ese L. paracasei contribuyan a la función inmunitaria. En cuanto a S. thermophilus, depende de la cepa. ¿Cuál usa Actimel? Aaah… Misterio.

Muy sospechoso.

No vamos a decirte que sea completamente inútil, pero ni está demostrado que funcione ni sustituye a un probiótico específico para subir las defensas.

Además, la mayoría de variedades de Actimel tienen en torno a un 10% de azúcares simples. Razón de más para limitar su consumo.

¿Cuánto tiempo se deben tomar los probióticos para las defensas?

Salvo pacientes inmunodeprimidos, tratamientos inmunosupresores o casos muy concretos, los probióticos han demostrado ser muy seguros.

Eso no significa que sí o sí debas tomarlos para siempre.

• Si eres una persona con tendencia a coger infecciones, sí te puede interesar usarlos de seguido.
• Si no, puedes tomarlos solo en los meses malos cuando sepas que tienes más probabilidad de enfermar.

Por último, recuerda que es esencial mantener hábitos saludables para tener un sistema inmunológico fuerte y sano. Si eso no lo cuidas…

Si quieres indicaciones más específicas acerca del uso de probióticos para aumentar las defensas (cómo tomarlos, cuáles serían mejores para ti…), consúltanos.

Consulta con un farmacéutico

Más info de la microbiota, los probióticos y las defensas

Aquí tienes nuestras referencias si quieres ahondar:

• Sociedad Española de Microbiota, Probióticos y Prebióticos (SEMiPyP). Workshops [Internet]. semipyp.es [citado el 14 de noviembre 2023]. Fuente.
• Gut Microbiota for Health. Todo sobre la microbiota intestinal [Internet]. gutmicrobiotaforhealth.com. 2022 [citado el 14 de noviembre de 2023]. Fuente.
• Manasa S, Talukdar R, Subramanyam C, Vuyyuru H, Sasikala M, Nageshwar D. Role of the normal gut microbiota. World J Gastroenterol. 2015 Aug 7; 21(29): 8787–8803. Fuente.
• Petersen C, Round J. Defining dysbiosis and its influence on host immunity and disease. Cell Microbiol. 2014 Jul; 16(7): 1024–1033. Fuente.
• Pandey K, Naik S, Vakil B. Probiotics, prebiotics and synbiotics- a review. J Food Sci Technol. 2015 Dec; 52(12): 7577–7587. Fuente.
• Swanson K et al. The International Scientific Association for Probiotics and Prebiotics (ISAPP) consensus statement on the definition and scope of synbiotics. Nat Rev Gastroenterol Hepatol. 2020; 17(11): 687–701. Fuente.
• La Fata G, Weber P, Hasan M. Probiotics and the Gut Immune System: Indirect Regulation. Probiotics Antimicrob Proteins. 2018; 10(1): 11–21. Fuente.
• Maldonado C, Cazorla S, Lemme JM, Vélez E, Perdigón G. Beneficial Effects of Probiotic Consumption on the Immune System. Ann Nutr Metab. 2019: 74(2): 115–124. Fuente.
• Harper A et al. Viral Infections, the Microbiome, and Probiotics. Front Cell Infect Microbiol. 2020; 10: 596166. Fuente.