Dishidrosis en manos: o cómo esas pequeñas ampollas pueden llevarte de cabeza

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    Un extraño picor te despierta por la noche. Enciendes la luz y ves unas pequeñas ampollas. Pero no recuerdas haberte quemado. Puede que tengas dishidrosis en las manos. Una afección que no es grave, aunque sí algo incapacitante.

    También se le llama eccema dishidrótico, y con la llegada del calor suele ser más común. 

    Vamos a contarte en qué consiste y cuáles son sus síntomas y tratamientos más usuales.

    ¿Qué es la dishidrosis en manos?

    Se trata de una dermatitis inflamatoria en la que aparecen pequeñas vesículas llenas de líquido en las palmas. Son muy parecidas a las ampollas clásicas, pero de tamaño minúsculo.

    Aparecen cuando menos lo esperas, aunque la primavera y el verano son su estación fetiche (debido al aumento de la temperatura).

    Si alguna vez has pasado por esto, sabrás lo difícil que es dormir cuando sientes un hormigueo constante en tus manos. (Con el hándicap del calor añadido).

    ¡Qué picor!

    La parte positiva es que suele mejorar en invierno y tiene tratamientos tópicos que mejoran los síntomas. (Además, no es contagiosa).

    La parte negativa es que puede darse a cualquier edad y es recurrente. Es decir, puede reaparecer en cualquier momento.

    ¿Cuáles son las causas de la dishidrosis en manos más frecuentes?

    Se desconoce el origen concreto, pero hay factores que pueden propiciar su aparición:

    Dermatitis atópica o de contacto

    Si sufres dermatitis atópica es más fácil tener eccema dishidrótico. 

    La sensibilidad de la piel ante irritantes y alérgenos puede acelerar su aparición. Por ejemplo, ante sustancias o alimentos que lleven níquel (chocolate, marisco, frutos secos, etcétera).

    Estrés

    ¿Estás más estresado de lo normal? Este puede ser uno de los motivos de que te salgan ampollas en las manos. 

    Tu cuerpo te está hablando. ¡Es momento de empezar a pensar en ti y relajarte!

    Luz solar

    En 2004, Man y colaboradores descubrieron que la exposición a los rayos del sol puede ser un desencadenante de la dishidrosis.

    Síntomas de la dishidrosis en manos

    ¿No estás seguro de que esas ampollitas sean dishidrosis? 

    Con estos datos saldrás de dudas fácilmente.

    Picor constante

    El síntoma característico por excelencia (y el más limitante). Se trata de una picazón que no cesa. Un hormigueo intenso y persistente.

    Inflamación y enrojecimiento

    La zona afectada puede engrosarse, inflamarse y verse enrojecida. Sobre todo si te rascas mucho. ¡Intenta evitarlo!

    Formación de pequeñas vesículas

    De aproximadamente un milímetro de diámetro. Suelen aparecer en pequeños racimos, aunque en casos más graves pueden agruparse y formar ampollas de mayor tamaño.

    Suelen salir por los lados de los dedos, aunque pueden llegar a ocupar toda la palma de la mano. (E incluso llegar a la muñeca o reverso de la mano).

    Dolor e infección

    No siempre ocurre. Las vesículas pican (y mucho). Factores que harán que te rasques incluso sin quererlo. 

    Con el rascado excesivo la piel se engrosa y se inflama más. 

    Cuando las ampollas se rompen, las bacterias pueden entrar más fácilmente. Esto puede provocar infección y dolor.

    ¿Cuánto dura?

    Lo normal es que de media un brote dure unas 3 semanas.

    En este tiempo verás cómo las ampollas se secan y tu piel se descama.

    (Momento perfecto para aplicar una buena hidratante de manos como Eucerin Aquaphor Pomada Reparadora. Indicada para pieles muy secas y agrietadas. Crea una barrera protectora y favorece la regeneración del tejido dañado).

    En casos recurrentes puede parecer que se está curando y, de repente, amanecer con un nuevo brote.

    Algo que sin duda puede afectar a tu calidad de vida y tu estado anímico.

    ¡Ánimo! Hay tratamientos que te ayudarán.

    ¿Cuál es el tratamiento del eccema dishidrótico o dishidrosis?

    A la hora de saber cuál es el mejor tratamiento, lo ideal es conocer la causa de la afección para controlar los brotes.

    Pero esto no siempre es posible. Por ello, lo principal es evitar los principales factores de riesgo como el estrés o ciertos alérgenos.

    Además de eso:

    Técnicas de relajación

    Si sientes que a mayor estrés, más brotes surgen… ¡Es hora de relajarse!

    La meditación o la práctica del yoga pueden ser útiles para reducir tu estrés y mejorar tu dishidrosis (y el resto de tu vida).

    Corticoides

    Los corticoides tópicos son efectivos para brotes “suaves”. Calmiox, por ejemplo, es una pomada con corticoides de venta libre que te ayudará a calmar el picor. (Puedes encontrarla en nuestra farmacia)

    En caso de brotes agudos, los corticoides orales como la prednisona suelen ser el tratamiento de elección. Consúltalo con tu médico.

    Antihistamínicos

    Tienen el objetivo de aminorar la sensación de picor. Así podrás dejar que los corticoides actúen sin rascarte y empeorar el brote.

    Eso sí, no te olvides de que un posible efecto de los antihistamínicos es la somnolencia. ¡Cuidado al volante!

    No hay nada más molesto que un picor intenso. Y cuando se sitúa en una zona del cuerpo tan importante (y funcional) como las manos, la cosa se complica.

    Si tienes dudas o no sabes si esas pequeñas ampollas pueden ser dishidrosis en las manos. ¡Acércate a conocernos! Y si te da mucha pereza… ¡Llámanos a este teléfono!

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